En términos relativos, Argentina tiene una baja tasa de homicidios reportada. Como se expone en el último informe,elaborado por el CELIV,hay distintas formas de medir la tasa de este delito. Para Argentina, el número total de homicidios anuales en los últimos años se convierte en una tasa algo superior a 5 muertes por cada 100.000 habitantes, bastante similar al promedio mundial de homicidios de 6,1 homicidios por cada 100.000 habitantes (UNODC, 2022).

La siguiente tabla (3.1) describe las tasas de homicidio por regiones del globo. Aporta el número de homicidios registrados en el año 2000 y 2018 así como las tasas por cada 100.000 habitantes. También compara la evolución a lo largo de estos 18 años. Una variación porcentual negativa (última columna) indica una disminución de la tasa y una positiva un aumento de la misma.

Como se observa, Latinoamérica y el Caribe no solamente son las regiones más violentas del planeta –con tasas que hasta duplican las de África y que triplican o cuadruplican las de Europa–, también es la única región del planeta que registró en estos 18 años un aumento de los homicidios.

¿Cómo se compara Argentina con las regiones del mundo? En la última línea de la tabla 3.1 se presentan los indicadores para nuestro país. Si bien los datos arrancan con base 2001 y se comparan contra ese año (que fue el segundo más letal de la Argentina desde que existen series de tiempo sobre homicidios) se observa claramente que hubo una disminución significativa en las tasas de homicidios, en línea con las tendencias mundiales, y divergiendo claramente con las tendencias de la región. ¿Por qué Argentina tiene estos registros que lo asemejan más a Europa que a América Latina?

Podemos decir que Argentina es unos de los países menos violentos de la región. Un lector argentino casual probablemente estaría sorprendido por tal aseveración, ya que la sensación de inseguridad es muy alta en el país, al igual que Chile, que también registra altas tasas de percepción de inseguridad. Ambos países tienen las tasas más bajas de homicidio de toda Latinoamérica y el Caribe. Los homicidios, como todo registro estadístico, fluctúan en el tiempo. Por ello, es importante observar la tasa de homicidio no solo para un año determinado sino como parte de una evolución o tendencia. Hay periodos en los que un país o región es más violento y otros que son menos violentos. Asimismo, las comparaciones entre años deben tener en cuenta periodos históricos. Por ejemplo, las tasas de homicidio en varios países de Centroamérica o Colombia eran muy altas a mediados de la década de 1990 (el país llegó a tener una tasa de homicidios de 81 cada 100.000 habitantes en el 1993) porque estaban inmersas o recién salían de severos conflictos armados.

A continuación, la tabla 3.2 detalla las tasas de homicidio para los 18 países de América Latina entre 1995 y 2012 (para algunos casos se cambiaron los años porque no se disponía de registros para los años indicados). La última columna indica el porcentaje de cambio entre estas dos mediciones. Este es un esfuerzo de registrar para todos los países de la región una tasa de mediados de los años 1990 y compararlas con un período particularmente de alta violencia (entre 2010 y 2015). Como lo indican los porcentajes de cambios, casi toda la región experimentó un aumento de los homicidios durante ese período.

Sin embargo, cuando se compara con un año menos violento (2019) las tasas de cambio registran ahora una disminución de la tasa de homicidios en comparación a 1995. Ahora veamos las tendencias:

Las tasas de 2019 permiten extraer algunas conclusiones.

• Primero, Argentina con una tasa de 5,2 por cada 100.000 habitantes es el segundo país menos violento de la región solo superado por Chile (existen leves variaciones dependiendo el año comparado, pero en general esta tendencia se sostiene). En comparación, Uruguay tiene una sorprendente alta tasa de homicidios luego de haber sido por décadas uno de los países más pacíficos del mundo.
• Segundo, al comparar 2019 contra 1995 se observa que la mayoría de los países han tenido variaciones importantes, ya sea positivas o negativas, siendo que la variación de Argentina resultó en un descenso de casos de -33%.
• Tercero, un dato interesante para observar es el comportamiento de los países que en la década de 1990 tenían tasas moderadas(es decir, inferiores a 10 por cada 100.000 habitantes). Entre estos países, Argentina es el que registra la caída más pronunciada, mientras que los otros países en esta categoría, o bien tuvieron aumentos, o registraron caídas muy moderadas.
• Cuarto, Argentina podría ser agrupada en un conjunto de países con violencia moderada, junto a Chile, Paraguay, Bolivia, Perú, Costa Rica y Nicaragua.Es decir, en términos de homicidio en la región predominan dos grandes grupos de países: aquellos con altas tasas epidémicas (más de 10 cada 100.000 habitantes) y otros con tasas más moderadas, ubicadas mayormente hacia el sur del continente.

 

En resumen, cuando comparamos las tasas de homicidios de Argentina con el resto de los países de la región se observa que es uno de los países que registra las tasas más bajas, que la tendencia muestra una disminución de los homicidios, y que su comportamiento es bastante disímil al de los otros países de Latinoamérica.

En esta publica seguimos pensando estas particulares del delito. Ver acá. 

 

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